Pigsi Protocolo de Intervención Global y Simultánea

CARME PAU - JULIO ALTOMONTE

DESPATX PEDAGÒGIC MULTIDISCIPLINARI

  
  

“SHARENTING”, O COM FER VULNERABLES ELS NOSTRES MENORS

Aquesta pràctica ja molt extesa als nostres dies té un nom : sharenting. Mot que prové de la suma de share (compartir) i de parenting (criança o paternitat). Consisteix a pujar a les xarxes fotografies dels fills i filles menors d'edat.

Pot ser una pràctica habitual en moments de vacances, de festa...en fi en aquells moments on abans ens hauríem limitat a treure una foto per guardar el record. Ara aquest mateix fet va acompanyat d'un altra, quasi automàtic i instantani, que és compartir-ho a la xarxa. La idea seria compartir amb les nostres famílies, amistats just aquell moment.

Però atenció!!!! Quan pengem una imatge a Internet, en aquell precís instant en perdem el control, i ja no sabem en mans de qui pot anar a parar. Tan se val que tinguem configurada la privacitat de la xarxa social en qüestió, perquè encara que siguem poques les persones que inicialment puguin veure allò que hem pujat, qualsevol d'elles podrà copiar aquella fotografia , encara que sigui a través de la tecla Impressió de pantalla , i reenviar-la o compartir-la per altres bandes. 

Aquesta setmana, concretament el divendres dia 20, es celebra el Dia mundial dels Drets dels Infants i precisament un dels drets és el de la preservar la seva privacitat. Quan nosaltres compartim la foto el que estem fent en realitat és crear una IDENTITAT DIGITAL de la persona. I ho fem en un moment que els nostres nens i nenes són menors i no es poden defensar perquè un cop es facin grans aquelles imatges no es poden esborrar, segueixen a la xarxa. I on haurà quedat la seva INTIMITAT, la seva PRIVADESA? Podem fer també una mica d'empatia i pensar , a nosaltres ens hauria agradat que els nostres pares haguessin compartit imatges nostres en bolquers, o sentats a l'orinal, o en alguna altra escena molt íntima? De ben segur que no. 

Altres problemes que pot comportar el sharenting és que s'utilitzin determinades imatges per fer ciberassetjament, que vagin a parar a mans de pederastes, o qui hi hagi qui les prengui per mesclar-les amb contingut de pornografia infantil. I no estem exagerant. Tristament ja ha passat.

Si el Mossos fan xerrades a adolescents per prevenir i evitar que s'exposin sense precaució a les seves xarxes és de calaix que cal prevenir també als pares amb fills petits.

 

   Alguns consells que podríem tenir presents serien aquests: 

  • Evitar primers plans o bé pixelar el rostre del menor
  • Que no sigui en una situació que els faci vergonya, o pensar si a nosaltres ens agradaria
  • Que no portin uniforme de l'escola, ja que estarem donant informació d'ells així com també és preferible que no hi aparegui la façana del lloc on viviu ni la matricula del cotxe. Per descomptat no donar nom i cognom
  • Que no hi surtin altres nens o nenes sense el consentiment explícit dels seus pares
  • Desactiveu les funcions d'ubicació i geolocalització de les imatges que compartiu

 

   I per últim hi ha un relat  que us podeu descarregar  titulat Les meves fotos i les fotos de mi. És un relat per nens i nenes entre 8 i 12 anys aproximadament.

INTELIGENCIAS

El estudio de la inteligencia tiene diferentes vertientes pero todas tienen en común reconocer que es la principal responsable de las diferencias individuales en el rendimiento cognitivo. Al respecto hay diferentes enfoques y teorías pero en este artículo abordaremos la perspectiva de Howard Gardner el cual defiende una estructura múltiple de la Inteligencia. Este autor no considera que la inteligencia esté estructurada de forma jerárquica y unitaria, ni tampoco  está de acuerdo con las implicaciones de este modelo en el ámbito de la medida de la medida de la inteligencia, especialmente con los test de CI (Coeficiente Intelectual).

Esta teoría de las Inteligencias Múltiples, conocida por las siglas MI fue planteada el 1983 pero en los últimos años ha ido adquiriendo más relevancia, sobretodo en el ámbito educativo y escolar.

La idea más importante de esta teoría se basa en no fundamentar la inteligencia en un solo ámbito o factor, sino en un conjunto de potencialidades que cada uno de nosotros tenemos en mayor o menor escala y que en la medida que se conocen y utilizan determinaran nuestro éxito en la vida escolar, profesional...Podemos partir de la idea que cada persona posee en un grado u otro cada una de estas inteligencias pero la forma en que las combinemos dará lugar a “nuestra forma de hacer”. Es precisamente por esta característica que esta teoría MI tiene una gran trascendencia en las escuelas pues coincide con muchas observaciones e intuiciones cotidianas de los educadores; la observación que los niños muestran que son listos y eficientes de muy diversas formas.

Es necesario plantear también que la teoría MI establece una diferencia entre la inteligencia entendida como aptitud o capacidad mental (es decir la idea conservadora) y la entendida como destreza o habilidad (y por lo tanto se puede entrenar para desarrollar mejor). Lógicamente esta segunda alternativa es la que está generando un replanteo pedagógico en los colegios pues implica el hecho de ayudar a los alumnos a reflexionar sobre sus procesos de aprendizaje, a generar cambios y a perder el miedo a descubrir ambientes de aprendizaje nuevos.

Los principios básicos de la Teoría de las Inteligencias Múltiples serian estos: 

  • Cada persona posee 8 inteligencias.
  • Las 8 inteligencias trabajan conjuntamente de una forma compleja.
  • La mayoría de las personas pueden desarrollar cada inteligencia hasta un nivel adecuado de competencia
  • Hay muchas maneras de ser inteligente en cada categoría.

Estas inteligencias de acuerdo a sus potencialidades y a sus vías de aprendizaje procedimental quedarían reflejadas de la siguiente forma: 

Este modelo de funcionamiento cognitivo implicaría que un mismo niño puede presentar niveles y rendimiento en diferentes áreas y que una persona podría ser muy habilidosa en un campo en concreto si éste se potencia y entrena. Así pues nuestra apreciación de su “inteligencia” no vendría marcado exclusivamente por los resultados en las áreas tradicionales basadas en el área del lenguaje, el procesamiento fonológico y el razonamiento lógico-matemático.

Y a su vez deberíamos tener en cuenta otros canales de aprendizaje como el aprendizaje sensorial, el aprendizaje musical, el aprendizaje por modelado, el aprendizaje basado en la interacción social, el autoconocimiento etc etc. 

Para concluir podríamos resumir diciendo  que en este mundo cada vez más competitivo , la inteligencia a menudo se utiliza como sinónimo del valor de las personas obteniéndola a partir de ciertas pruebas que aportan unos valores cuantitativos. Pero la realidad de nuestra mente y su potencial es mucho más rica de lo que queda expresado en estos valores numéricos. 

Quizás nos deberíamos preguntar como padres y educadores ¿por qué no reconocer que todo aquello que nos hace únicos y especiales se encuentra en habilidades mentales que NO tienen que ver solo con resolver puzzles y operaciones matemáticas, sino que también involucran la sensibilidad artística o la gestión de las emociones? 

A través de la Teoría de las Inteligencias Múltiples su autor nos ha ofrecido la posibilidad de valorar nuestras fortalezas, en vez de limitarnos a tener en mente aquello que el mercado de trabajo y el modelo educativo tradicional espera de nosotros. Con ello los padres podemos ayudar a nuestros hijos en ideas como:

  • interpretar el valor de los resultados escolares por igual en todas las áreas
  • fomentar esas habilidades que percibimos en nuestros hijos y así entrenarlas
  • dar la cabida necesaria a aspectos tan importante como es la gestión de las emociones
  • no sustituir en ellos/as esas potencialidades que presentan pues solo así conseguiremos estimularles mejor
  • confiar en los planteamientos pedagógicos que nuestras escuelas están realizando últimamente en este sentido y reforzarlos también desde casa (los cambios son lentos pero estamos en ello).

Propuesta de accion preventiva en la relacion de nuestros hijos con la pornografia en redes.

Es una realidad insoslayable que la pornografía se extiende en amplitud de cobertura y variedad temática, sin pausas y a un ritmo cada vez mas rápido. Simultaneamente se reduce la edad a la que los niños toman contacto con estos contenidos, en los últimos 5 años el promedio  ha descendido de los 12-14 a los 8-10 en la actualidad. El consumo o permanencia horas/día ha aumentado de 15 minutos a 1,30 horas diarias.

Estos son datos concretos que involucran a nuestros hijos e inciden en su crecimiento emocional y percepcion de conductas,valores,relaciones sociales y limites de respeto al otro, de forma profunda y duradera.

A estas alturas es evidente que por multiples motivos, poco analizados y menos difundidos, las autoridades que controlan este trafico de información y formación, no hacen nada util para acotar el numero, contenido, destinatarios de este fenomeno, algo semejante ocurre con los sitios de apuestas online donde se esta verificando un nivel de crecimiento y precocidad de uso, semejante.

En la actividad cotidiana de nuestro Despacho Pedagogico nos involucramos en ,cada vez mas consultas, de padres preocupados por que sus hijos dedican cada vez un numero mayor de horas a juegos online, que los alejan de su vida familiar, social y del cumplimiento de sus tareas escolares, modifican su ritmo vigilia-descanso, disminuyen su rtendimiento en la escuela y presentan cambios de conducta apreciables.

Todo este tema de preocupacion merece ser atendido y reencaminado, pero las consecuencias del consumo de pornografia son mucho mas importantes y permanentes en la vida de nuestros hijos.

Ya es casi corriente que las paginas XXX se anuncien con banners mas o menos explicitos en sitios de juegos online, de esta forma acceden a un publico muy joven y desprevenido que toma contacto por primera vez y de alli, comienzan a conocer....

Los programas de bloqueo de contenidos no deseados,casi no se usan,los padres aducen evitar enfrentamientos con sus hijos, coartarles su libertad o simplemente que los niños son informados por amigos  o en internet, como dejarlos de lado.

A la vista de este panorama es evidente que debemos tomar la iniciativa, como padres y neutralizar o minimizar los riesgos implicitos para nuestros hijos.

En este punto adelantamos y dejamos en claro nuestra conviccion respecto a que cualquier prohibicion, sancion o excusa engañosa, deben ser dejadas de lado, no solo por ineficaces, ademas generan perturbaciones en la relacion con los niños y en la imagen y concepto que forman de nosotros, padres.

Nuestro Protocolo de intervencion en este tema plantea una conducta de anticipación, adecuadamente planteada para no invadir su intimidad emocional, encuadrando nuestro abordaje en el contexto de un dialogo incidental, donde el niño sie3nta que tiene toda la serenidad y la amplitud para expresar sus ignorancias, dudas, temores y aparentes certezas.

Debe dosificarse este proceso de forma de no agotarlo de inmediato, no responder mas que lo preguntado, no saturar de información no pedida, ni de argumentar consecuencias sombrías.

Segun la experiencia recogida, se obtiene un puente de comunicación permeable, que poco a poco permite tratar el tema con menos reservas y mas provecho, progresivamente se van formando los “anticuerpos emocionales” que permitirán relativizar y restar dramatismo a las imágenes, muchas veces traumaticas para ellos.

¿DIAGNÓSTICO O ETIQUETA?

Es muy frecuente encontrar a padres que acceden a consulta para saber qué le ocurre a su hij@. Esta alerta la habrá podido lanzar el colegio o bien la familia donde se han dado cuenta de que algo no funciona bien. A partir de ahí se iniciará la búsqueda de posibles soluciones. Es en este momento es necesario tranquilizar a estos padres que normalmente buscan encontrar una palabra que defina lo qué le ocurre a su hijo.

Habrá ocasiones en que poner una palabra o etiqueta no resolverá la situación, es más , puede incluso que esas dificultades o problemas presentados respondan a una variedad y conjunto de alteraciones que será difícil clasificar y tratarlas por separado. En este ámbito podemos encontrar los diagnósticos con TDA(H), Dislexia, Déficits en la adquisición del Lenguaje, Problemas de habla que vinculamos a Logopedia, TEL, Asperger, Disortografía, Discalculia, Trastornos de la Personalidad y una lista que podría ser interminable.

Todo tratamiento, intervención o técnica terapéutica debe ir precedido de un BUEN  diagnóstico, evaluación o prueba. Ese paradigma es tan sólido como que el éxito o fracaso del tratamiento efectuado, en la mayoría de las veces estará justificado en un correcto o incorrecto diagnóstico. Es decir ante un mal diagnóstico se realizará una intervención inadecuada y por lo tanto nuestro hijo no presentará mejoría.

Debe tenerse muy presente que en todo diagnóstico hay un componente subjetivo por parte del evaluador, aún en aquellas pruebas que tiene un alto componente instrumental que presupone medidas imparciales.

Este componente subjetivo hace imprescindible que el examinador conozca en profundidad y de primera mano, características del examinado, rasgos de personalidad, historial previo, en resumen, que dentro de lo posible se informe y se forme un cuadro de LA PERSONA que examinará, a fin de valorar la información aportada por el examen, en el contexto de ESA PERSONA

Es importante tener presente que un diagnóstico es el punto de partida de un proceso terapéutico. Sucesivos controles a lo largo del tratamiento nos indicaran la evolución del mismo.

Entendido esto,  debemos concebir el diagnóstico como el principio de una película y no como una foto. El niño mejorará (o no) y deberemos ir reajustando nuestra intervención y técnica.

Cuando dicho diagnóstico se toma como simple información, se transforma en una Etiqueta, en un rotulo que identifica al niño como un “ y la etiqueta elegida”.

Esta etiqueta se transforma entonces en un techo, en un condicionamiento que limita el desempeño del niño en una o más áreas de su persona.

Se toma esa etiqueta como una realidad fáctica e irremediable y con ese preconcepto es recibido en otros colegios o gabinetes, donde es tratado en función de ese “ANTECEDENTE” de esta forma se condiciona definitivamente cualquier tipo de progreso o mejoria. Justificando este proceder en ese diagnóstico que dejó de serlo para transformarse en una etiqueta desvalorizante, condicionante y estigmatizante entre sus compañeros y profesores.

Así pues y a modo de conclusión:

 

  • No debemos precipitarnos en concluir que ante ciertas dificultades de nuestro hij@ (influidos hoy por la vasta información de internet) tiene “esto o aquello”.
  • En caso de tener la certeza de ese problema o dificultad comentar con los profesores pues es quienes tienen a nuestro hij@ en un gran número de horas.
  • Una vez decidido que es preciso un diagnóstico optar por un equipo o centro que pueda realizar un estudio completo de la persona. Se trata de no solo obtener unas medidas en relación a su inteligencia, velocidad lectora y un infinidad de ítems que se mesuran con un porcentaje. Se trata también de conocer su estado emocional , cómo se siente, como se ve. Porqué en definitiva si estos aspectos están “tocados” la intervención deberá empezar por ese aspecto y así poder ayudarlo a superarse.
  • No es para nada conveniente explicarle al niño con detalles su diagnóstico. Otra cosa diferente es comentarle a grandes rasgos porqué tiene dificultades concretas en la escuela o conductas determinadas en casa. Hemos comprobado que en ocasiones el propio niñ@ se pondrá un muro delante, se autodefinirá con esa etiqueta, y será mucho más difícil ayudarlo para recomponer su situación pues su autoestima habrá quedado seriamente dañada.
  • La intervención una vez tenemos el diagnóstico o evaluación deberá ser consensuado con la familia y el colegio. No podemos olvidar que la interacción de ese niño se realiza con estos tres entornos. Si solo modificamos uno el resultado será más lento o quizás inexistente.

¿Qué lenguaje utilizamos con nuestros hijos?

   

Los padres tenéis una responsabilidad importantísima en la crianza de nuestros hijos y en especial en un aspecto: sois el nexo entre ellos y la realidad de su entorno, sois quienes les enseñáis a comprender el mundo y de vuestras actitudes y acciones se crearán los fundamentos de su desarrollo como personas.

   La herramienta más importante para este aprendizaje de la vida , para el desarrollo cognitivo y psicológico es el LENGUAJE, que debe utilizarse en un entorno afectivo y con unas normas claras.

   ¿ Y cómo lo logramos? 

Podemos empezar recordando que es necesario hablar a los niños por muy pequeños que sean. Pero hablar de forma natural, sin infantilizar  nuestro lenguaje y aportando siempre un modelo correcto. 

Las personas que viven alrededor de un niño: padres, educadores, familia… tienen que tener en cuenta que los niños aprenden de cada experiencia, y que en la adquisición del lenguaje es igual, imitando a todos los referentes que tenga.

Los niños emplean el lenguaje como medio para relacionarse con los demás niños, así como para satisfacer sus necesidades, controlar el entorno, expresar su propia identidad y adquirir nuevos conocimientos.

El proceso de adquisición del lenguaje se favorece de los diversos intercambios comunicativos y lingüísticos con los padres o miembros más cercanos de la familia.

Tenemos que diferenciar el tono cariñoso de uno aniñado, para que el niño aprenda a relacionarse y a expresarse correctamente, sin utilizar demasiados diminutivos o con palabras poco claras, como decir “aba” en vez de agua, o “bibi” en vez de bibe. 
Demostrar afecto a través del lenguaje apropiado es posible. Esto no significa que tengamos que dejar de hablar al peque en un tono dulce, pero podemos evitar el uso excesivo de diminutivos y expresiones de bebés. Si este uso es realizado de forma continua, nos podremos encontrar con un peque que crece sin nombrar las cosas correctamente, con un lenguaje “creado” en el hogar pero que fuera de el no lo entiende nadie.

Debemos tener siempre presente que el niño es un ser social, por tanto el lenguaje no se puede enseñar aislado del contexto social. Es decir, no podemos separar el lenguaje de todas las circunstancias que lo rodean.

Si cada vez que quiere algo nuestro hijo, se lo damos antes de que pueda pedirlo verbalmente, estamos mermando su capacidad de desarrollo del lenguaje. Nuestro hijo aprenderá a solicitar las cosas con sólo mirar o señalar. No se verá en la necesidad de demandarlo verbalmente.

Al conseguir todo lo que quiere sin decir nada, su desarrollo de la pronunciación o de la construcción de frases se verá retrasada con respecto a la de los demás niños de su edad.

Así mismo, los adultos deben pronunciar de manera correcta las palabras y evitar hablar al niño de forma infantilizada, así como pronunciar correctamente y evitar corregirles de forma directa.

En algunas ocasiones, existen dificultades lingüísticas debidas al nerviosismo del niño ante la insistencia de sus padres para que aprenda nuevas palabras o bien para que diga cosas más o menos graciosas ante familiares o amigos. Ante estas situaciones el niño responde casi siempre con una oposición que puede dificultar su normal aprendizaje.

Al mismo tiempo los niños experimentan diversas emociones (rabia, miedo, tristeza, alegría...) que les son difíciles de gestionar. Podríamos ayudarles poniendo palabras a aquello que les pasa pero sin juzgar lo que sienten.

 

- Es muy motivante para el niño, contarle cuentos cortos, en los que intervengan animales, y ellos puedan participar haciendo ruidos, bailes, gestos, etc., luego se le harán una serie de preguntas sencillas sobre el contenido.

  • Hágale aprender su nombre completo, el de su familia y la dirección.

- Manifestarle entusiasmo y alegría cada vez que ponga interés en la actividad que está realizando, aunque no siempre le salga bien.

  • No se debe proteger demasiado, puesto que no dejamos que desarrolle su personalidad al completo. Por tanto, hay que darle autonomía para que se relacione con los demás y participe en distintas actividades.
  • Se le debe escuchar atentamente y siempre responder a sus preguntas, convirtiendo la comunicación en un placer. Miremos a la cara de forma que le aseguramos que tiene nuestra atención.
  • Los niños aprenden mucho por imitación. Por ello, cuando hable con su hijo, hágalo despacio, pronunciando correctamente, sin darle gritos. Nunca se le debe ignorar cuando quiera hablar, ni reforzar la expresión defectuosa que en un principio puede parecer.

- Aprovechar cualquier ocasión ( la observación de las prendas de vestir en el armario, los muebles de una habitación, o los colores) para nombrarlos. Siempre colocándose a la altura de los ojos. Pero de forma natural, sin aleccionar. Sencillamente conversando

  • En cuanto al esquema corporal, podemos nombrar las partes del cuerpo cuando aprende a vestirse por ejemplo.
  • Con apoyo visual de libros o fotografías, estimular una conversación a través del dibujo que aparezca, repasando los conceptos básicos: derecha-izquierda, arriba-abajo, colores, utilidad de cada objetos ...
  • Háblele a su hijo pronunciando claro y bien, mirándole a la cara. ...
  • NO diga a su hijo, mientras habla, que se detenga y comience de nuevo.
  • NO le imite cuando hable mal, aunque le parezca gracioso.

       A forma de conclusión podriamos decir que

  1. a) el LENGUAJE es fundamental en el desarrollo de nuestro hijo.

b)que de nosotros depende una introducción correcta de él pues somos sus primeros interlocutores (si aparece un problema fonológico se deberá entonces recurrir al especialista). De no ser así , corregir después este mal hábito

c)podemos hablar de forma cariñosa sin utilizar diminutivos, palabras sustitutivas

  1. d) en este periodo de vacaciones podemos aprovechar para frenar un poco nuestros tiempos y dedicarnos a CONVERSAR, ESCUCHAR, y así facilitar esa imitación que ellos realizan.

En busca de la nueva normalidad para nuestros hijos

Desde hace ya 7 meses toda la sociedad, sus integrantes individuales, instituciones, empresas, etc estamos inmersos en un brusco quiebre de estilos de vida, rutinas cotidianas, formas de trabajo, esparcimiento, vida de relación y hasta en la intimidad de nuestros hogares nos sentimos o somos compelidos a cambios inmediatos, que en muchos casos no comprendemos acabadamente ni en su justificación ni en su efectividad, nos cuestionamos más o menos abiertamente o los aceptamos con reparos, según nuestro criterio y lejos de fundamentos técnicos o científicos que nos justifiquen, generalmente es nuestra resistencia a abandonar una forma de vida, temor a lo desconocido o simplemente mantener contra toda realidad nuestra escala personal de prioridades.

La Covid está actuando como revulsivo catalizador de cambios intra familiares y por ende sociales a todos los niveles, nuevas formas de comunicación y relación en general, se ponen en marcha de manera improvisada, ignorando su efectividad y las consecuencias negativas que pueden generar-

La educación de nuestros hijos es uno de los aspectos que han debido cambiar de inmediato y sin planificación previa, desde el comienzo del confinamiento hemos verificado un progresivo deterioro en la disposición de nuestros hijos a la posibilidad de aceptar la rutina telemática y aplicarse a ella, aun aceptando que en los inicios de esta forma de escolaridad, los docentes no contaban con planes elaborados y practicados, una heroica improvisación, con errores ,que permanentemente está siendo corregidos, va generando una base de experiencia que permite ser más eficientes en el uso de la telemática en forma intensiva y precoz, en el campo educativo.

También los padres se han visto compelidos a asumir tareas de apoyo educativo a sus hijos, simultáneamente con una nueva forma de trabajo, telemática, sin más alternativas que la inmediata aceptación.

Aunar las dos demandas simultáneamente ha sido y es una importante tarea.

Los escolares, nuestros hijos, independientemente de la edad o el curso que afronten, además de tener que desarrollar de forma telemática la última parte del ciclo anterior, están ahora mismo afrontando en primera línea la vuelta a los establecimientos, a los horarios de entrada, a las obligaciones propias de la actividad, más un cumulo de nuevas demandas, en relación a la seguridad sanitaria.

Tanto los padres, como los docentes, son fundamentales actores a la hora de procurar el éxito de este paso, que con las precauciones  adecuadas, permitirá, no solo el desarrollo curricular, sino además, el fundamental contacto social entre iguales, relevante campo de ajuste conductual y emocional para nuestros hijos.

Al respecto es muy importante remarcar una premisa elemental a la hora de educar:

El ejemplo directo es insustituible como herramienta de enseñanza-

Los largos discursos, las inacabables recomendaciones, los gráficos ilustrativos o vídeos temáticos no pueden competir ni siquiera mínimamente con el ejemplo directo de la ejecución espontanea por parte del adulto, de aquella conducta que se busca instalar en los niños.

Nuestros hijos escuchan y atienden poco, sus ojos son la puerta de entrada más importante, nunca más cierto aquello de UNA IMAGEN VALE MAS QUE MIL PALABRAS.

Los niños deben ver, naturalmente ejecutada por el adulto, la conducta que se les dice que todos debemos cumplir, de lo contrario, no solo no la repetirá, también el respeto por ese adulto se verá disminuido y por extensión a sus conceptos y enseñanzas.

Padres, docentes y adultos en general, deben internalizar las medidas preventivas indicadas, para que sean ejecutadas espontáneamente y no solo delante de los niños.

De esta forma no solo serán más efectivas dichas medidas, se alejaran los riesgos de recrudecimiento de contagios, además se mejorara la calidad de comunicación con los niños y el mutuo respeto que permite un mejor desempeño general.

500 DIAS....y 4

El recién  nacido tiene un mandato, una compulsión genética irresistible y perentoria, absolutamente vital, en términos de vivir o morir, la base de la “Selección Natural” que permite la continuidad o la desaparición de una especie dada, simple y dramáticamente por no poder adaptarse a los cambios que el medio ambiente le demanda.

Ese mandato es madurar, aprender, crecer, alimentarse, dormir, mantener un metabolismo equilibrado y defenderse con éxito de enfermedades, accidentes u otros imponderables.

Y este mandato es tan importante, que todo aquello que dificulte , entorpezca o lentifique este proceso, será resistido por el niño, será combatido y posiblemente eliminado a fin de seguir adelante en su crecimiento y usara todos los medios de que disponga, desde el primer segundo de vida extrauterina y tendrá numerosas oportunidades para demostrar que ese ser aparentemente indefenso y débil, posee una vitalidad y resistencia fisiológica, que no volverá a tener a partir de los 20 años de vida.

Muchos pueden no estar de acuerdo con este concepto, comparando a este recién nacido, con los de otra especie que en minutos deben ponerse de pie, amamantarse con éxito y defenderse como sea de otros animales que se alimentan de él.

Todo esto es sobradamente compensado con el nivel más alto en la evolución neurológica y complejidad del sistema que tiene el homo sapiens.

Este nivel es de tal complejidad, que son necesarios más de 10 años para su desarrollo y no olvidemos que alrededor de 500 días es el tiempo que tendremos para poner las bases sólidas de una crianza-educación que marcará y condicionará el futuro de nuestro hijo en todos los aspectos de su vida.

Ciertamente parece muy poco tiempo, solo un óptimo uso del mismo, nos permitirá dotar a nuestro hijo de un marco educativo que le permita ganar en autonomía, experiencia social y conductual, educación formal útil en calidad y orientación a actividades que le permitan transitar a su satisfacción la vida y concretar sus proyectos.

Si, como Padres utilizamos este breve tiempo de forma errónea, las consecuencias no tardarán en ser evidentes y si no se corrigen, se presentarán primero en el ámbito familiar, luego en el escolar y social y ganarán en gravedad y bajos rendimiento,  autoestima y tolerancia a la frustración, progresiva rebeldía o desinterés en la diaria tarea escolar y rutinas agotadoras en casa en pos de que cumpla sus tareas en tiempo y forma, que las haga él mismo, pidiendo sólo la ayuda que realmente precise, que no consiga delegarlas en padres ”colaboradores” que en muchos casos se encontrarán haciendo ellos mismos esa tarea, junto a un hijo/hija que solo está presente físicamente, pero abstraído de lo que debería estar haciendo, es más simple para él, que alguien se ocupe de eso que no le gusta, no lo comprende y no lo motiva.

Intentará trasladar este esquema de conducta que le va muy bien, al ámbito escolar donde obviamente fracasará, nadie, ni profesores, ni compañeros aceptarán dedicarle su tiempo de forma exclusiva, esta reacción puede generar respuestas de rebeldía y agresión de su parte, o un profundo desinterés, casi apatía, en tomar apuntes, realizar las actividades solicitadas, llevar una agenda ordenada y cumplirla, mantener niveles de relación y respeto por sus profesores y sus compañeros que no le generen bajas notas, advertencias, sanciones y el rechazo de sus iguales que lo aislarán o lo convertirán en protagonista , víctima de agresiones, discusiones u otras eventualidades.

500 DIAS.......y 3

Es cierto que el niño crecerá, no dormirá más en la cuna y podrá moverse por sí mismo, pero también es cierto que nos habrá estado “educando” en otras actividades, para que sean de su satisfacción, repitiendo la conducta que desde lactante le ha dado buen resultado:

Llantos, gritos, rabietas, arrojar o romper cosas, agredir físicamente, son diferentes niveles de intensidad del “castigo” con el que obligará a los padres a una determinada conducta que lo satisfaga.

La motivación de este trabajo, no es otra que mostrar y fundamentar nuestra opinión y conocimientos respecto al proceso Crianza-Aprendizaje y motivar reflexiones, cambios de estrategias, preservar una zona de privacidad de la pareja y de cada uno de sus integrantes, que permita alejar disputas, mantener proyectos personales que sean compatibles con esta nueva tarea que durará muchos años, pero que sin duda no debería significar cambios de tal gravedad que nos lleven como padres a dejar de ser dos personas, unidas por sentimientos e intereses comunes, que deciden libremente compartir sus vidas y formar una familia con descendencia.

 

Fundamentos Pedagógicos y Neurofisiológicos 

Al momento del nacimiento, luego de una gestación de duración normal, El feto a termino, emprende el proceso de parto, ordenado por estímulos hormonales, mecánicos, metabólicos y otros que aun suponemos, que se originan mayoritariamente en el organismo materno y que son mucho más complejos que la expulsión espontanea por el canal vaginal o extraído por cesárea, ya que en tiempos previos al parto, varios sistemas orgánicos del feto sufren profundos cambios que lo preparan para su vida autónoma, donde deberá respirar por sí mismo, ingerir alimentos y producir una digestión que garantice la cantidad y calidad de nutrientes que su metabolismo demande y los sistemas orgánicos de eliminación de residuos de esta digestión , o del metabolismo celular, que ya están funcionando, se ajusten a estímulos nuevos que los pondrán en acción.

El conjunto de barreras inmunológicas que se deben crear para defenderse de agentes patógenos, es muy elemental al momento del nacimiento y debe completarse en poco tiempo.

El sistema musculo-esquelético, es aun inmaduro, los músculos son de una estructura celular básica y poco eficiente en términos de uso óptimo de la energía, los huesos, en su mayoría son aun mas cartilaginosos que óseos y ciertamente que así debe ser para permitir la flexibilidad y cambios de diámetro que demanda el parto y la fase de recuperación que se produce en el post-parto.

En resumen, nace, una criatura que en muchos términos se considera “no terminada” con un desarrollo incompleto, que solo en el sistema nervioso terminara de perfeccionarse en los primeros 15 años de vida, de manera progresiva y dependiendo en gran medida de la calidad de los estímulos de toda índole, que reciba en este periodo.

No debemos olvidar que en este sistema nervioso se producen o coordinan o estimulan o inhiben funciones tan diversas como; Los sentidos, el funcionamiento orgánico en general, las emociones, el aprendizaje, la memoria, la creatividad, el sueño, los pensamientos, la palabra, la comunicación en sus diversos canales, la comprensión, la recepción de estímulos y la elaboración inmediata de respuestas ajustadas en intensidad y sentido.

También debe tenerse presente, que ciertas conductas complejas, como lo que comúnmente llamamos “Escrúpulos” o sea ese límite moral, ético que nos señala conductas que pueden afectar o lastimar a otros, a fin de evitarlas, no se incorporaran hasta bastante avanzado el proceso de maduración.

Es en esta ausencia a temprana edad, donde está la explicación a la aparente “crueldad” que los niños son capaces de usar; “No te quiero” “Ojala te mueras” o expresiones por el estilo que causan un impacto emocional intenso en los padres u otros familiares.